lunes, 20 de mayo de 2013

Eloísa y Abelardo

Hoy os quiero hablar sobre Eloísa y Abelardo, que son los protagonistas de una historia de amor trágica y legendaria como Romeo y Julieta o Tristán e Isolda, pero con la diferencia de que esta sí que ocurrió de verdad, y fue en la Francia en el siglo XII, con el consecuente escándalo en la sociedad de la época

Cómo hemos llegado a conocer esta historia? Pues por la autobiografía de Abelardo, Historia calamitatum y la correspondencia que mantuvieron  entre ambos durante muchos años que estuvieron separados hasta la muerte de él.



Pedro Abelardo era un erudito de la época, filósofo, dominaba la dialéctica, es decir el arte de argumentar, así como la lógica, donde es considerado un genio y también fue  maestro en otras materias como aritmética, geometría, astronomía y música.

Debido a la habilidad que tenía para argumentar en público solía vencer a todos sus rivales en las discusiones intelectuales, lo que lo trajo la admiración de sus alumnos y la enemistad de muchos maestros y colegas de la época; el éxito que tenía le fue forjando una personalidad arrogante y orgullosa pues él mismo decía que no había otro filósofo como él! y encima, a su privilegiado "coco" se le unía que era muy atractivo y tenía a todas las jóvenes de la época loquitas por él, como bien decía él, "ninguna se le resistía"...

También en la misma época y en la misma ciudad existía una bella joven que destacaba entre las demás por ser muy culta e intelectual, cosa rara en esa época donde el estudio era casi exclusivo de los hombres. Su nombre era Eloísa y estaba al cuidado de su tío Fulberto, canónigo de la Catedral de París. Éste al ver el don que tenía su sobrina contrató al mejor maestro de la época, osea, Abelardo, para que le diese clases particulares y así su sabiduría e interés por aprender fuera colmados.

Cuando empezaron las clases, Eloísa tenía 17 años y Abelardo 39, por lo que éste en su fuero interno tenía un oscuro propósito: seducir a la chiquilla y que se enamorara de él, pero sólo por alimentar su amor propio y reafirmase en la idea de que ninguna se le resistía. ¿ Qué ocurrió? Efectivamente Eloísa sucumbió a sus encantos pero él también a los de ella, es decir, su intención egoista del principio pasó a ser amor de verdad por primera vez en su vida.



Y entre clase y clase pasó lo que pasó, que ella se quedó embarazada y su tío los pillo, cosa que no le gustó nada y montó en una verdadera cólera. Abelardo mandó a Eloísa a casa de su hermana en Inglaterra para protegerla de su tío y que tuviera al bebé, al que llamaron Pedro Astrolabio, con alusión a un instrumento que se utiliza para observar las estrellas.

Pero el tío siguió molestándoles y su ira no cesaba, les obligó a casarse, auque Eloísa no quería ya que decía que un intelectual casado perdía prestigio (la verdad es que muchos historiadores han intentado entender las razones inusuales por las que Eloísa no quería casarse, y todos llegan a la conclusión que de verdad era para no estropear la fama de Abelardo). Al final por obediencia a su amado accedió al matrimonio.

Pero el tío Fulberto todavía no estaba satisfecho y en su locura, creyendo que Abelardo iba a causar más daño a Eloísa, encargó a un grupo de matones y a un medico que le castrasen!, así que una noche en la que Abelardo dormía, entraron en su cuarto y realizaron "la cirugía".

Más que el daño físico, lo que le dolía a Abelardo era el orgullo, como escribe él en su biografía.

Después de esto, Abelardo le pidió a Eloísa que se enclaustrara en un convento, y él se dedicó al estudio  y a la redacción de tratados y libros acabando también, en un convento sus últimos años.

Pero desde el convento, Eloísa le escribía cartas a Abelardo recordando sus días de pasión durante las clases y le repetía lo enamorada que estaba de él...pero él intentaba mantener un tono neutral en sus cartas al responder y no avivar más la llama que había entre ellos. Sólo ya al final de su vida se volvió más cariñoso en una de sus cartas y le confirmó a su amada su amor todavía vivo y la pasión que sintió por ella.

Abelardo murió en 1163 y Eloísa vivió otros 22 años más que él, pero al morir los dos fueron enterrados en el cementerio del Pere Lachaise, en París, donde se les construyó un mausoleo.



                                                                                                                                                                                     Hoy en día hay escritos muchos libros sobre ellos, desde científicos y rigurosos con la historia real como el de Régine Pernoud, fantástica investigadora e historiadora; Otros que reflexionan sobre la moralidad de los protagonistas como el de Étienne Gilson o el que cuenta de manera más amena la historia, como es el del autor José Luis Corral.

Por supuesto también están publicadas las cartas que se escribieron entre ellos, entre otros muchos documentos más.


Pues esta es la historia de Elísa y Abelardo del París del siglo XII donde fueron los más famosos y criticados de la época, y muy al pesar de Abelardo, no por sus logros intelectuales sino por su romance que nunca murió desde que se conocieron y siguió vivo aún con todas las penalidades que pasaron.

Espero que os haya gustado y os animéis a conocer esta historia más en profundidad.

Gracias por leerme,

Ali.

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